Yeruldelgger, la muerte nómada

Yeruldelgger, la muerte nómada

  • Autor: Manook, Ian
  • Editor: Ediciones Salamandra
  • ISBN: 9788416237364
  • eISBN Epub: 9788417384715
  • Lugar de publicación:  Barcelona , España
  • Año de publicación digital: 2019
  • Mes: Junio
  • Páginas: 400
  • Idioma: Español
Los años de lucha contra el crimen y el dolor por la muerte de su hija Koshi han hecho mella en Yeruldelgger. Encerrado en un misticismo a ultranza, hace cuatro meses que el incorruptible comisario ha abandonado la policía de Ulán Bator y ha plantado su yurta en el desierto de Gobi, donde, gracias al silencio y la belleza del lugar, espera reencontrarse con las tradiciones ancestrales y recuperar la paz espiritual. Pero su retiro durará muy poco: contra su voluntad, dos jinetes extraños lo empujarán a la acción, y Yeruldelgger se verá envuelto así en un fuego cruzado entre mercenarios pagados por voraces compañías mineras, políticos inmorales, policías corruptos y jóvenes seguidores del juramento de Gengis Kan. Una maraña sangrienta en una Mongolia destripada por las excavadoras de las multinacionales, expoliada por las ansias de los especuladores y arruinada por la venalidad de sus dirigentes, y de la que Yeruldelgger, siempre fiel a sus ideales, no saldrá indemne.

Desde las áridas estepas mongolas hasta el corazón de Manhattan, y desde Canadá hasta Australia, Ian Manook insufla en el género policíaco un aire más negro y salvaje que nunca. Tras el éxito de las dos primeras entregas, con más de medio millón de lectores adictos a las hazañas del famoso comisario de Mongolia, Yeruldelgger. La muerte nómada pone un final dramático a una de las series más originales de los últimos tiempos y supone el adiós de uno de los personajes más inolvidables de la novela negra.
  • Portada
  • Contenido
  • Dedicatoria
  • 1. «...Jamukha»
  • 2. «...cuatro meses sin hacer el amor»
  • 3. ...Pequeño gran hombre!
  • 4. «Un agujero lleno de cadáveres»
  • 5. ...y el depósito explotó
  • 6. «Bueno, ¿vamos a ver ese osario?»
  • 7. ...en la cuerda y la carne desgarrada
  • 8. «¡Recoged por lo menos los brazos!»
  • 9. ...los primeros ninjas
  • 10. «Con un agujero justo en medio de la frente»
  • 11. «...con unos calzoncillos ajustados rojosy unas chaquetillas rosas»
  • 12. «...si lo haces, ¡no tengas miedo!»
  • 13. De repente, una sombra le atravesó el corazón
  • 14. «...a quienes pueden destruirlo todo»
  • 15. ...lo cegaba con sus luces largas
  • 16. Con la cara de Yeruldelgger recortada
  • 17. «...en la garganta de un muerto!»
  • 18. «...en los burdeles de Shanghái o de Macao»
  • 19. «¡¿También a ella te la quieres tirara la manera nómada?!»
  • 20. «Sobre todo para ser una placa intracontinental»
  • 21. ...por dentro y por fuera
  • 22. «...y encuéntrala!»
  • 23. «¿Al menos está muerto ese puto chino?»
  • 24. «Una huella de lobo»
  • 25. ...¡aquello se le daba bien!
  • 26. «...¡incluso para un dingo!»
  • 27. ...la huella de lobo en la frente?
  • 28. «¿Qué hago? ¡Se está despertando!»
  • 29. «El forense, ¿de verdad es gay?»
  • 30. «¡Póngase a ello!»
  • 31. «Sí, se puede decir así»
  • 32. «...en que no lo sepa»
  • 33. «...el abuelo de Hitler»
  • 34. «¡Ha vuelto!»
  • 35. Salvar Mongolia
  • 36. «Un juego, supongo, o una advertencia...»
  • 37. «...Delgger Kan!»
  • 38. ...como para que unos cuantos crímenesla inflamaran?
  • 39. ¡Vivo!
  • 40. «...te devuelvo a tu burdel»
  • 41. ...gritaba en la cama
  • 42. «...Chagdarsüren Djügderdemidiin Bilegt»
  • 43. ...la mirada tranquila del asesino
  • 44. «¿Qué quieres decir con eso?»
  • 45. «...soñar con el aparato del australiano?»
  • 46. «¡Por supuesto que quiero!»
  • 47. ...en medio del olor de su orina
  • 48. «Yo allí no vuelvo»
  • 49. Su hermana de la estepa
  • 50. «Una tontería de las grandes»
  • 51. «...manosean a las chicas aunque ellas no quieran...»
  • 52. «Deben de estar viendo la tele»
  • 53. «¡Y pon Fox News!»
  • 54. ...de un crepitar de flashes
  • 55. «...el Africano os tiene en el punto de mira»
  • 56. De golpe
  • 57. ...de un puñetazo
  • 58. ...un centenar de chicas y treinta milicianos
  • 59. «¡No me extraña que seas un cornudo!»
  • 60. «Ocúpate tú de ella. Si puedes»
  • 61. ...el rostro de la asesina. La auténtica
  • 62. «¿Incluso para eliminar a Yeruldelgger?»
  • 63. «Yo también tengo cosas que decirle»
  • 64. «...el que sacaron de la cama de Solongo»
  • 65. ...no le gustó en absoluto lo que vio en ellos
  • 66. «Ir a presionar a De Vilgruy»
  • 67. ...no lo resistiría
  • 68. ...se hundió en un sueño sin imágenes
  • 69. «Eh, ¿estás muerto, o qué?»
  • 70. «A cambio quieren los tangas y los sujetadores»
  • 71. ...quizá perdido él también
  • 72. ...una duna lejana, que lloraba
  • 73. ...ocho metros al día?»
  • 74. ...deshacerse de Bekter cuanto antes
  • 75. ...él lloraba también
  • 76. ...aprendía también a ser un hombre fogoso...
  • 77. ...olvidar todo recuerdo del camino
  • 78. ...ahora que estaban en paz
  • Créditos

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