No desde que leí MAUS sentí tanta cercanía con unas viñetas que se desdibujaban como una biografía tan personal como histórica. Hubo en el curso de mi vida afición sobre esta modalidad más madura del cómic con los dibujos elegantes de algunos artistas que publicaban en los años 70 en la revista italiana Linus. La inmediatez testimonial de esta narrativa ilustrada cobra sentido al constatar los pasos en la vida de una pequeña comunidad norteamericana anti-imperialista comprometida con la izquierda en los albores de la toma del poder en Cuba por Fidel Castro y su posterior consolidación como Líder Máximo. La desilusión paso a paso va desvelándose amargamente desde la llegada de la protagonista y autora a la isla hasta su despedida. Este capítulo de la historia cubana nunca se ha narrado. Deja particularmente en evidencia a los exégetas como Herbert Mathews, Jean-Paul Sartre, entre otros, sean “left wing liberals” o “gauche divine”. Si la verdad histórica existe, se muestra aquí en otra faceta del caleidoscopio y pesadilla que todos hemos vivido.