“Verne aquí saca a relucir su cuasi olvidada vena teatral. Tras muchos años sin participar en el género nos podríamos haber esperado una obra honesta pero mediocre. No es así. Nos demuestra cómo, además de instruir a los niños, es capaz de hacernos reír como si volviésemos a ser infantes”. Émile Zola, Causeries dramatiques de l´avenir national “Sátira mordaz sobre la avaricia como no se había visto desde Volpone”. Edmond de Goncourt, Le Figaro “Una inteligente comedia a la vez que un retrato de costumbres de nuestra época. Nadie que vaya a verla saldrá defraudado”. Alphonse Daudet, Le Gaulois “Obra ejemplarizante. Un retrato fino de la avaricia y de cómo la divina providencia tuerce los proyectos de los pecadores”. Léon Bloy, Le Siècle