«Este libro, Sincronismos, sorprende por haber tematizado muy lúcidamente la pasión erótica para expresar la búsqueda insaciable del amor en todas las dimensiones humanas. La unión erótica, sin perder su directa carnalidad, es símbolo, a su vez, del hambre de sabiduría y de amor que alienta en la vida del poeta, un hambre que tiene dimensiones cósmicas. El autor ha realizado su búsqueda apoyándose en unas imágenes muy originales y variadas, las cuales, a pesar de su intensidad emotiva, sugieren mucho más de lo que dicen y exigen del lector una búsqueda personal tan ambiciosa como la del autor. Por otra parte, la sabia conjunción del ritmo y el uso eficaz del paralelismo y otros recursos de repetición contagian al lector, de forma simultánea a la lectura, la premura del tiempo, la urgencia del amor y el inmenso desierto de la soledad».