Dos ciudades hermanadas en un entretenido disparate literario.
La suegra de Terio sospecha que su yerno le pone los cuernos a la Manoli, hija de ella —ella es examante de un capo de la mafia marsellesa—. Doña Zoila contrata a un detective aficionado para que lo espíe en Manchester, en donde el supuesto burlador currela como miles de españoles más. El chinito Zhao Cheng está enamorado de la inglesita Fiona, que es la amante del burlador.
Hay mafiosos jubilatas, asesinos muy sádicos, policías ingleses y españoles, barquitos turísticos, un cementerio a oscuras... El autor conoce muy bien las dos ciudades por donde se mueven sus personajes.