El juego es un gran aliado para el desarrollo cognitivo del ser humano, en especial, a edades tempranas. Es un recurso insustituible para la maduración de estructuras mentales que incluyen procesos como la percepción, la memoria, la atención, la adquisición del lenguaje o la estructuración del pensamiento. Constituye, además, una de las herramientas más efectivas para promover el aprendizaje activo, gracias a su capacidad de simular la realidad ofreciendo un escenario idóneo para cometer errores y aprender de ellos en la práctica.
En este libro, Jorge Batllori nos presenta 111 nuevos enigmas, sorprendentes y muy divertidos, para el desarrollo de las competencias intelectuales básicas. Los juegos se presentan agrupados según las habilidades que estén llamados a desarrollar: lógica, memoria, comunicación, observación, estrategia, razonamiento, etc. Todos ellos están perfectamente descritos y van acompañados de orientaciones didácticas, modo de desarrollarlos y su correspondiente solución. Los juegos constituyen un excelente instrumento didáctico para su uso en las aulas no sólo con fines educativos sino también lúdicos y de entretenimiento.
Si jugar es algo divertido por sí mismo y pensar es algo que va muy bien para ejercitar nuestro cerebro, ¿qué puede haber mejor que realizar ambas actividades a la vez?