Firmemente convencido de que había sido designado por dios para restaurar la pureza de la fe de abraham y moisés, una fe resquebrajada al caer de nuevo pueblos enteros en la idolatría, mahoma se propuso difundir la palabra divina y restablecer el culto a un único dios. Para ello, utilizó primero el convencimiento, y luego, si éste no daba los frutos apetecidos, la espada. Fue pues, profeta y guerrero, y si al principio la mayor parte de sus conciudadanos, incluso de sus parientes, lo consideraban poco menos que un farsante, y se mofaban de él o lo perseguían, lo cierto es que años después había conseguido unificar a multitud de tribus bajo la bandera del islam y su poder se había vuelto invencible. Poseedor de una capacidad intelectual extraordinaria, sencillo en su vida personal, tan cruel como generoso, mahoma reconocía su debilidad por los perfumes y las mujeres, algo que no le restaba espiritualidad, pues él mismo repetía que era sólo un hombre, incapaz de otro milagro que no fuera recoger la palabra de dios en el corán. Para los no creyentes en el islam, mahoma no es más que un alucinado fanático consagrado a una causa que creía ordenada por dios; para los musulmanes es e portador de la palabra divina, el último profeta y el creador de la nación árabe. Su vida fue una amalgama de amor y batallas, de espiritualidad y búsqueda del poder terrenal, de realidad y delirio, de devoción piadosa, venganzas y traiciones.
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- Prefacio del autor
- Capítulo I. Notas preliminares sobre Arabia y los árabes
- Capítulo II. Nacimiento y orígenes de Mahoma su infancia y su niñez
- Capítulo III. Tradiciones sobre la Meca y la Caaba
- Capítulo IV. Primer viaje de Mahoma con la caravana a Siria
- Capítulo V. La actvidad comercial de Mahoma su matrimonio con Cadijah
- Capítulo VI. La conducta de Mahoma tras su boda...
- Capítulo VII. Mahoma difunde secreta y lentamente sus doctrinas...
- Capítulo VIII. Líneas generales de la fe mahometana
- Capítulo IX. Mahoma padece las burlas respecto a sus doctrinas...
- Capítulo X. Omar Ibn Al Jattab, sobrino de Abu Jahl, intenta vengar a su tío...
- Capítulo XI. El edicto de incomunicación aparece misteriosamente...
- Capítulo XII. Viaje nocturno del profeta desde la Meca hasta Jerusalén y de allí al séptimo cielo
- Capítulo XIII. Mahoma realiza nuevas conversiones de peregrinos...
- Capítulo XIV. Los musulmanes en Medina...
- Capítulo XV. El matrimonio de Mahoma y Ayesha...
- Capítulo XVI. La espada anunciada como instrumento de Fe ...
- Capítulo XVII. La batalla de Beder
- Capítulo XVIII. La muerte de la hija del profeta, Rokaia...
- Capítulo XIX. Aumenta el poder de Mahoma su resentimiento contra los judíos...
- Capítulo XX. Henda alienta a Abu Sofian y a los koreishitas...
- Capítulo XXI. Traición de ciertas tribus judías; su castigo la devoción...
- Capítulo XXII. Expedición de Mahoma contra los Beni Mostalek su matrimonio con Barra, una cautiva...
- Capítulo XXIII. La batalla del foso...
- Capítulo XXIV. Mahoma inicia una peregrinación a la Meca...
- Capítulo XXV. Expedición contra la ciudad de Jaibar...
- Capítulo XXVI. Envío de misiones a varios príncipes...
- Capítulo XXVII. Peregrinación de Mahoma a la Meca...
- Capítulo XXVIII. Asesinato de un enviado musulmán en Siria...
- Capítulo XXIX. Los propósitos con respecto a la Meca...
- Capítulo XXX. Sorprenden y toman la Meca
- Capítulo XXXI. Hostilidades en las montañas campamento enemigo...
- Capítulo XXXII. Muere Zeinab, la hija del profeta...
- Capítulo XXXIII. Preparativos para una expedición contra Siria...
- Capítulo XXXIV. La entrada triunfal en Medina. Castigo para quienes...
- Capítulo XXXV. Abu Beker conduce la peregrinación anual...
- Capítulo XXXVI. Mahoma envía a sus capitanes a empresas lejanas...
- Capítulo XXXVII. De los dos falsos profetas Al Aswad y Moseilma
- Capítulo XXXVIII. El ejército prepara la marcha contra Siria...
- Capítulo XXXIX. La persona y el carácter de Mahoma...
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