Cualquiera que sea la definición que se haga del término, fue en el siglo XX cuando la cuestión nacional vasca se convirtió en un hecho social significativo. La aceptación de la idea de nacionalidad vasca no fue, sin embargo, inmediata y fue, además, controvertida. Incluso bajo la Segunda República (1931-1936) -objeto de este estudio-, cuya Constitución de 1931 reconocía el derecho a la autonomía de las regiones, no hubo autonomía vasca hasta octubre de 1936, hasta casi tres meses después de iniciarse la Guerra Civil española. Este libro pone el énfasis en dos puntos: 1) en el pluralismo político, social y cultural del País Vasco, y 2) en el problema vasco como «conflicto interno» de la propia sociedad vasca -debido a la naturaleza etnicista, y por ello divisoria, del nacionalismo vasco-, tanto o más que como conflicto con el Estado español.