El señorío de los incas es la segunda parte de la Crónica del Perú, y trata sobre la historia de los Incas y las dinastías del Antiguo Perú. Fue descubierta en la Biblioteca del Monasterio de El Escorial por el historiador peruano Manuel González de La Rosa, que preparó una edición para publicarla en Londres en 1873. Esta no vio la luz por razones económicas. En 1880, Marcos Jiménez de la Espada, publicó finalmente la obra, con el título de Segunda parte de la crónica del Perú, que trata del señorío de los incas yupanquis y de sus grandes hechos y gobernación (actualmente conocida como El Señorío de los Incas).
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- Sumario
- Créditos
- Presentación
- Prefacio
- Capítulo III
- Capítulo IV. Que trata lo que dicen los indios de este reino que había antes que los Incas fuesen conocidos, y de cómo había fortalezas por los collados, de donde salían a se dar guerra los unos a los otros
- Capítulo V. De lo que dicen estos naturales de Ticiviracocha, y de la opinión que algunos tienen que atravesó un Apóstol por esta tierra, y del templo que hay en Cáchan y de lo que allí pasó
- Capítulo VI. De cómo remanecieron en Pacarec Tampu ciertos hombres y mujeres, y de lo que cuentan que hicieron después que de allí salieron
- Capítulo VII. Cómo estando los dos hermanos en Tampu Quiru, vieron salir con alas de pluma al que habían con engaño metido en la cueva, el cual les dijo que fuesen a fundar la gran ciudad del Cuzco; y como partieron de Tampu Quiru
- Capítulo VIII. Cómo después que Manco Capac vio que sus hermanos se habían convertido en piedras, vino a un valle donde encontró algunas gentes, y por él fue fundada y edificada la antigua y muy riquísima ciudad del Cuzco, cabeza principal que fue de todo el imperio de los Incas
- Capítulo IX. En que se da aviso al lector de la causa porque el autor, dejando de proseguir con la sucesión de los reyes, quiso contar el gobierno que tuvieron, y sus leyes, costumbres qué tales fueron
- Capítulo X. De cómo el Señor, después de tomada la borla del reino, se casaba con su hermana la Coya, que es nombre de reina; y cómo era permitido tener muchas mujeres, salvo que, entre todas, solo la Coya era la legítima y más principal
- Capítulo XI. Cómo se usó entre los Incas que del Inca que hubiese sido valeroso, que hubiese ensanchado el reino o hecho otra cosa digna de memoria, la hubiese de él en sus cantares y en los bultos; y no siendo sino remisio y cobarde, se mandaba que se tratase poco de él
- Capítulo XII. De cómo tenían coronistas para saber sus hechos, y la orden de los quipos como fue, y lo que de ello vemos ahora
- Capítulo XIII. Cómo los Señores del Perú eran muy amados por una parte y temidos por otra de todos sus súbditos, y cómo ninguno de ellos, aunque fuese gran señor muy antiguo en su linaje, podía entrar en su presencia, si no era con una carga en señal de grande obediencia
- Capítulo XIV. De cómo fue muy grande la riqueza que tuvieron y poseyeron los reyes del Perú y cómo mandaban asistir siempre hijos de los señores en su Corte
- Capítulo XV. De cómo se hacían los edificios para los Señores, y los caminos reales para andar por el reino
- Capítulo XVI. Cómo y de qué manera se hacían las cazas reales por los Señores del Perú
- Capítulo XVII. Que trata la orden que tenían los Incas, y cómo en muchos lugares hacían de las tierras estériles fértiles, con el proveimiento que para ello daban
- Capítulo XVIII. Que trata la orden que había en el tributar las provincias a los reyes, y del concierto que en ello se tenía
- Capítulo XIX. De cómo los reyes del Cuzco mandaban que se tuviese cuenta en cada año con todas las personas que morían y nacían en todo su reino, y cómo todos trabajaban y ninguno podía ser pobre con los depósitos
- Capítulo XX. De cómo había gobernadores puestos en las provincias, y de la manera que tenían los reyes, cuando salían a visitarlas, y cómo tenían por armas unas culebras ondadas con unos bastones
- Capítulo XXI. Cómo fueron puestas las postas en este reino
- Capítulo XXII. Cómo se ponían los mitimaes, y cuántas suertes dellos había, y cómo eran estimados por los Incas
- Capítulo XXIII. Del gran concierto que se tenía cuando salían del Cuzco para la guerra los Señores, y cómo castigaban los ladrones.
- Capítulo XXIV. Cómo los Incas mandaron hacer a los naturales pueblos concertados, repartiendo los campos en donde sobre ello podrían haber debates, y cómo se mandó que todos generalmente hablasen la lengua del Cuzco
- Capítulo XXV. Cómo los Incas fueron limpios del pecado nefando y de otras fealdades que se han visto en otros príncipes del mundo
- Capítulo XXVI. De cómo tenían los Incas consejeros y ejecutores de la justicia, y la cuenta que tenían en el tiempo
- Capítulo XXVII. Que trata la riqueza del templo de Curicancha y de la veneración que los Incas le tenían
- Capítulo XXVIII. Que trata los templos que sin este se tenían por más principales, y los nombres que tenían
- Capítulo XXIX. De cómo se hacía la Capaccocha y cuánto se usó entre los Incas, lo cual se entiende dones y ofrendas que hacían a sus ídolos
- Capítulo XXX. De cómo se hacían grandes fiestas y sacrificios a la grande y solemne fiesta llamada Hátun Raimi
- Capítulo XXXI. Del segundo rey o Inca que hubo en el Cuzco, llamado Sinchi Roca
- Capítulo XXXII. Del tercero rey que hubo en el Cuzco, llamado Lloque Yupanqui
- Capítulo XXXIII. Del cuarto Inca que hubo en el Cuzco, llamado Mayta Capac y de lo que pasó en el tiempo de su reinado
- Capítulo XXXIV. Del quinto rey que hubo en el Cuzco, llamado Capac Yupanqui
- Capítulo XXXV. Del sexto rey que hubo en el Cuzco y lo que pasó en su tiempo, y de la fábula o historia que cuentan del río que pasa por medio de la ciudad del Cuzco
- Capítulo XXXVI. Del séptimo rey o Inca que en el Cuzco hubo, llamado Inca Yupanqui
- Capítulo XXXVII. Cómo, queriendo salir este Inca a hacer guerra por la provincia del Collao, se levantó cierto alboroto en el Cuzco, y de cómo los Chancas vencieron a los Quichuas, y les ganaron su señorío
- Capítulo XXXVIII. Cómo los orejones trataron sobre quién sería Inca, y lo que pasó hasta que salió con la borla Viracocha Inga, que fue el octavo rey que reinó
- Capítulo XXXIX. De cómo Viracocha Inga tiró una piedra de fuego con su honda a Caitomarca, y cómo le hicieron reverencia
- Capítulo XL. De cómo en el Cuzco se levantó un tirano, y del alboroto que hubo, y de cómo fueron castigadas ciertas mamaconas, porque, contra su religión, usaban de sus cuerpos feamente, y de cómo Viracocha Inga volvió al Cuzco
- Capítulo XLI. De cómo vinieron al Cuzco embajadores de los tiranos del Collao, nombrados Sinchi Cari y Zapana, y de la salida de Viracocha Inga al Callao
- Capítulo XLII. De cómo Viracocha Inga pasó por las provincias de los Canches y Canas, y anduvo hasta que entró en la comarca de los Collas y lo que sucedió entre Cari y Zapana
- Capítulo XLIII. De cómo Cari volvió a Chucuito, y de la llegada de Viracocha Inga, y de la paz que entre ellos trataron
- Capítulo XLIV. De cómo Inca Urco fue recibido por gobernador general de todo el imperio y tomó la corona en el Cuzco, y de cómo los Chancas determinaban de salir a dar guerra a los del Cuzco
- Capítulo XLV. De cómo los Chancas allegaron a la ciudad del Cuzco y pusieron su real en ella, y del temor que mostraron los que estaban en ella, y del gran valor de Inca Yupanqui
- Capítulo XLVI. De cómo Inca Yupanqui fue recibido por rey y quitado el nombre de Inca a Inca Urco, y de la paz que hizo con Hastu Guaraca
- Capítulo XLVII. De cómo Inca Yupanqui salió del Cuzco, dejando por gobernador a Lloque Yupanqui, y de lo que sucedió
- Capítulo XLVIII. De cómo el Inca revolvió sobre Vilcas y puso cerco en el peñol donde estaban hechos fuertes los enemigos
- Capítulo XLIX. De cómo Inca Yupanqui mandó a Lloque Yupanqui que fuese al valle de Xauxa a procurar de atraer a su señorío a los Guancas y a los Yauyos, sus vecinos, con otras naciones que caen en aquella parte
- Capítulo L. De cómo salieron de Xauxa los capitanes del Inca y lo que les sucedió, y cómo se salió de entre ellos Ancoallo
- Capítulo LI. De cómo fundó la casa real del Sol en un collado que por encima del Cuzco está, a la parte del Norte, que los españoles comúnmente llaman la Fortaleza, y de su admirable edificio y grandeza de piedras que en él se ven
- Capítulo LII. De cómo Inca Yupanqui salió del Cuzco hacia el Collao y loque le sucedió
- Capítulo LIII. De cómo Inca Yupanqui salió del Cuzco, y lo que hizo
- Capítulo LIV. De cómo hallándose muy viejo Inca Yupanqui, dejó la gobernación del reino a Tupac Inca, su hijo
- Capítulo LV. De cómo los Collas pidieron paz, y de cómo el Inca se la otorgó y se volvió al Cuzco
- Capítulo LVI. De cómo Tupac Inca Yupanqui salió del Cuzco, y cómo sojuzgó toda la tierra que hay hasta el Quito, y de sus grandes hechos
- Capítulo LVII. Cómo el rey Tupac Inca envió a saber desde Quito cómo se cumplía su mandamiento, y cómo, dejando en orden aquella comarca, salió para ir por los valles de los Yuncas
- Capítulo LVIII. De cómo Tupac Inca Yupanqui anduvo por Los Llanos, y cómo todos los más de los Yuncas vinieron a su señorío
- Capítulo LIX. Cómo Tupac Inca tornó a salir del Cuzco, y de la recia guerra que tuvo con los del Guarco, y cómo después de los haber vencido, dio la vuelta al Cuzco
- Capítulo LX. De cómo Tupac Inca tornó a salir del Cuzco y cómo fue al Collao y de allí a Chile, y ganó y señoreó las naciones que hay en aquellas tierras, y de su muerte
- Capítulo LXI. De cómo reinó en el Cuzco Guayna Capac que fue el doceno r ey Inca
- Capítulo LXII. Cómo Guayna Capac salió del Cuzco y lo que hizo
- Capítulo LXIII. De cómo el rey Guayna Capac tornó a mandar hacer llamamiento de gente, y cómo salió para lo de Quito
- Capítulo LXIV. Cómo Guayna Capac entró por Bracamoros y volvió huyendo, y lo que más le sucedió hasta que llegó a Quito
- Capítulo LXV. De cómo Guayna Capac anduvo por los valles de Los Llanos, y lo que hizo
- Capítulo LXVI. De cómo saliendo Guayna Capac de Quito, envió delante ciertos capitanes suyos, los cuales volvieron huyendo de los enemigos, y lo que sobre ello hizo
- Capítulo LXVII. Cómo, juntando todo el poder de Guayna Capac, dio batalla a los enemigos y los venció y de la gran crueldad que usó con ellos
- Capítulo LXVIII. De cómo el rey Guayna Capac volvió a Quito, y de cómo supo de los españoles que andaban por la costa, y de su muerte
- Capítulo LXIX. Del linaje y condiciones de Guascar y de Atahuallpa
- Capítulo LXX. De cómo Guascar fue alzado por rey en el Cuzco, después de muerto su padre
- Capítulo LXXI. De cómo se comenzaron las diferencias entre Guascar y Atahuallpa, y se dieron entre unos y otros grandes batallas
- Capítulo LXXII. De cómo Atahuallpa salió del Quito con su gente y capitanes, y de cómo dio batalla a Atoco en los pueblos de Ambato
- Capítulo LXXIII. De cómo Guascar envió de nuevo capitanes y gente contra su enemigo, y de cómo Atahuallpa llegó a Tomebamba, y la gran crueldad que allí usó, y lo que pasó entre él y los capitanes de Guascar
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