«Marcovaldo se compone de veinte relatos. Cada uno está dedicado a una estación; el ciclo de las cuatro estaciones se repite por tanto cinco veces. Todos los relatos tienen el mismo protagonista, Marcovaldo, y siguen más o menos el mismo esquema. El texto de presentación dice: “En medio de la ciudad de cemento y asfalto, Marcovaldo va en busca de la Naturaleza. Pero ¿aún existe? La que él encuentra es una naturaleza rencorosa, contrahecha, comprometida con la vida artificial. Personaje bufo y melancólico, Marcovaldo protagoniza una serie de fábulas modernas”, es la última encarnación de una serie de cándidos héroes pobre diablos a lo Charlot, con una particularidad: la de ser un “hombre de la Naturaleza”, un “Buen Salvaje” exiliado en la ciudad industrial. ¿Libro para niños? ¿Libro para jóvenes? ¿Para adultos? O más bien, ¿es un libro en el que el autor expresa su propia relación, perpleja e interrogante, con el mundo?».
Italo Calvino
- Portadilla
- Marcovaldo, o sea Las estaciones en la ciudad
- Presentación
- Primavera. I. Setas en la ciudad
- Verano. II. Vacaciones en un banco del parque
- Otoño. III. El pichón municipal
- Invierno. IV. La ciudad perdida en la nieve
- Primavera. V. La cura de las avispas
- Verano. VI. Un sábado de sol, arena y sueño
- Otoño. VII. La fiambrera
- Invierno. VIII. El bosque en la autopista
- Primavera. IX. El aire sano
- Verano. X. Un viaje con las vacas
- Otoño. XI. El conejo venenoso
- Invierno. XII. La parada equivocada
- Primavera. XIII. Donde es más azul el río
- Verano. XIV. La luna y Gnac
- Otoño. XV. La lluvia y las hojas
- Invierno. XVI. Marcovaldo en el supermercado
- Primavera. XVII. Humo, viento y pompas de jabón
- Verano. XVIII. La ciudad entera para él
- Otoño. XIX. La ciudad de los gatos obstinados
- Invierno. XX. Los hijos de Papá Noel
- Notas
- Créditos