Aullidos, al principio, era solo un estallido de dolor, un lamento desgarrado de animal herido: el desahogo de un sufridor, que se había visto obligado a soportar en silencio múltiples afrentas, marginaciones e injusticias. Como el globo que se va hinchando e hinchando, hasta que, al fin, explota[...], tanta sumisión &mdash,sin derecho a réplica&mdash, no podía prolongarse más. Más tarde, cuando el autor notó que empezaban a cicatrizar sus heridas, dio un giro al texto, mezclándolo con cierta dosis de ironía y sentido del humor, y aplicándole, al mismo tiempo, una férrea autocensura, que consideró inevitable. Por lo que los aullidos se fueron transformando en un canto a la esperanza &mdash,una vez superado el dolor&mdash,, y, sobre todo, en un homenaje a la fantasía. Aunque no pretende imponer a los demás su criterio, ni jamás se consideró en posesión de la verdad, asegura que su desbordada imaginación le ha servido de gran ayuda para vivir. Y, en ocasiones, para sobrevivir. Es algo que forma parte de él. Probablemente, debido a su buena voluntad, ha sufrido una infinidad de batacazos, zancadillas y traiciones... Pero, a pesar de ello, aún no ha escarmentado. Por lo que ha pedido que graben en su lápida: Pasó por la vida haciendo "El Indio". Este libro es, además, una exaltación de la libertad, en contra de los prejuicios, de los moldes establecidos, de los caminos trillados, de las apariencias, de la imitación[...] Y, por último, un canto a las alas del espíritu, que nos permiten volar a nuestro aire &mdash,único y exclusivo&mdash, hasta más allá de los espacios siderales.
- Título
- Copyright
- Introducción
- Prólogo
- Pasó por la vida haciendo el indio
- Candilejas
- Los parientes
- El duende
- Trigo y Esmeralda
- El botón asesino
- El Ave Fénix
- “Mi piso”
- La entrada de Cleopatra en Roma
- Decir la verdad
- Mi carácter
- Los colegios
- Las visitas
- Los viudos
- ¡Qué malo es ser malo!
- La heredera
- Un romántico trasnochado
- Noviembre
- ¿Busco amigos?
- Mi calva
- Los buitres
- El sexto sentido
- Es la vida…, que cobra. Es la vida…, que paga
- La envidia
- Tengo frío
- Aprender a defenderme
- ¿Por qué adelantarlo todo?
- La felicidad
- La gimnasia
- Mi funeral
- La niña de la estación
- La forastera
- Recuerdos lejanos
- Mis alas
- Epílogo
- Índice