Liam Bentley era un hombre que sabía lo que quería. Y cuando descubrió que, siete años atrás, Regan había tenido un hijo suyo, quiso casarse con ella.
Cuando Regan conoció a Liam, cayó cautivada por su poder, su ambición y su atractivo sexual. Ahora era mayor y más sensata. Sin embargo, por alguna razón, cuando Liam le exigió que se casara con él, dijo que sí.