"¡Dios mío! ¡Un minuto entero de felicidad! ¿Acaso es poco para toda una vida humana...?"
Durante una noche blanca en San Petersburgo, fenómeno que se da durante el solsticio de verano y a causa del cual la oscuridad nunca es completa, un joven solitario e introvertido conoce de forma accidental a Nástenka, una joven y bella muchacha. La aparición de la joven ilumina su existencia con un fulgor trágico, y el hecho de haber presentido el amor en sus primeras y sinceras conversaciones son suficientes para que el joven soñador se considere un bienaventurado.
El joven narra que tras el primer encuentro, ambos desconocidos deciden encontrarse durante las cuatro noches siguientes, con la condición de que él no se enamore de ella. Así comienzan las largas noches blancas en las que Nástenka relata su triste historia de vida, y en las que tienen conversaciones que tratan de forma sutil y envolvente sobre las grandes pasiones que mueven al ser humano: el amor y el desamor, la ilusión, la esperanza y el desengaño.
A pesar de que el protagonista cree haber encontrado el alivio tan esperado a su soledad, el destino indicaba que se tenían que separar... Sin embargo, la efímera felicidad de las noches blancas le devolvió la ilusión y la esperanza, junto con el gran aprendizaje de amar libremente.
- Noches blancas
- Copyright
- Noche primera
- Noche segunda
- Historia de Nastenka
- Noche tercera
- Noche cuarta
- La mañana
- Om Noches blancas