Muchas historias son las que en la poesía de Gina se suceden heridas, hirientes, pobladas de animales sufrientes y a veces también de seres humanos. Breves escenas tan piadosas como despiadadas en las tardes que se inclinan sobre los árboles.
- Cubierta
- Portada
- Un rumor de insectos
- Como un bosque oscuro
- Estación de guerra
- El día vagabundea con estrépito
- Como animales enfermos
- Una mujer frente a un muro de paja
- Dejaste tus pensamientos en el tragaluz
- La piel oscura del día
- Anabela, tus palomas ya no obedecen
- El crecimiento de la luz
- Índice
- Contracubierta