La Universidad del siglo XXI es un lugar para aprender, para provocar el aprendizaje; aunque esto no implica que la universidad sea sólo o el único lugar donde se puede aprender.
Pero, ¿de qué tipo de aprendizaje hablamos?, ¿qué significa aprender?, ¿cómo debe ser el aprendizaje?, ¿cómo se lleva a cabo? Aunque en este libro se abordan distintos temas y se presentan diferentes ejemplos, todos ellos están unidos por un único tema de fondo: la formación y el origen del conocimiento, y el significado y la naturaleza misma del aprendizaje.
En torno al aprendizaje, el libro estudia cómo se percibe, cómo se experimenta, cómo se entiende y cómo se maneja. Los autores quieren ir más allá de la “calidad” y de la “competencia”, argumentando que los métodos de enseñanza (lo que supone aprender), la evaluación (saber lo que se ha aprendido) y la gestión universitaria (la organización de aprendizaje), deben facilitar los resultados del aprendizaje, y llevarse a cabo dentro de un marco ético apropiado.