Entre los cambios sobrevenidos con motivo de la crisis financiera global figura en lugar destacado uno que ha quedado en la penumbra: la dificultad para buena parte de la población de leer e interpretar los hilos de la trama narrativa que se invoca para justificar los recortes sociales y la restricción de derechos fundamentales. Los expertos y los medios de comunicación manejan una jerga que legitima las medidas políticas que recetan los magos de la escolástica económico-financiera: un círculo vicioso. El empeño de una historia cultural se cifra en poner al descubierto tales hilos. Se lleva a cabo mediante una perspectiva panorámica que incluye la sabiduría de los clásicos y combina elementos de varias disciplinas con vistas a construir un relato legible que ilumine las variables en juego.