Muchas cosas confluyen en este libro, del mismo modo que son muchos los caminos recorridos en el momento preciso en que se sube el telón. Aquellas personas que han dado esos pasos lo saben bien: Todo un universo se conjura. Y cuando se desgrana la primera palabra, cuando se establece un pacto comunicativo entre el espectador y el actor, cuando se traspasan las emociones y la historia se decanta y toma forma a través de la expresión, nadie ajeno al ámbito teatral, puede imaginar lo que antecede, todos los procesos de formación y transformación que hasta ese momento se han vivido y que constituyen una rica suma de acciones e interacciones, de aprendizajes y de improvisaciones, de risas y de llantos vertidos.
En las páginas de este libro se despejan teorías, se deshojan esos caminos, se marcan posibles procesos, se desvela la historia del hecho dramático, se vislumbran alternativas… Se nos aproxima a la íntima experimentación, al encuentro con el texto, al abrazo simbólico con su lenguaje, al ensayo cotidiano, a la búsqueda del personaje, a la construcción y a la reconstrucción, a la puesta en pie de una obra que identifica a un grupo, que expresa lo que, de forma colectiva, aman y piensan.