Persona constituye un trabajo ensayístico, biográfico-testimonial y poético original. A partir de una escritura fragmentaria y continua -signada por la brevedad de la nota reflexiva y la intensidad de las imágenes propias del verso poético- y un relato gráfico próximo a la estética del bricoleur, en Persona se evidencia una meditación descarnada sobre la convención de que el yo nos permite sobrevivir al horror, sobre el modo en que negamos colectivamente una cuestión cruel: que no lograremos conservarnos como sujetos para fundar una historia o una experiencia que pueda ser transmitida o heredada.