El texto entrega los detalles y pormenores de lo que significó la construcción de la cárcel de Punta Peuco, construida para albergar a condenados por violaciones a los derechos humanos en dictadura, desde el punto de vista de un protagonista que transitaba por espacios no visibles en uno de los momentos más complejos, tensos y apasionantes de la transición chilena a la democracia. Claudio Martínez, arquitecto y exdirector de Gendarmería, ofrece en estas páginas su relato personal sobre el proceso de encarcelamiento de Manuel Contreras y Pedro Espinoza (condenados por el asesinato de Orlando Letelier), la lucha de poder entre los militares, el Estado y la sociedad civil y la división que provocó el caso en la sociedad.