Como consecuencia de la toma de la Bastilla, Claudine de Tourville y su madre huyen de Francia hacia las pacíficas costas británicas. En la mansión ancestral de su familia materna, Claudine siente que ha llegado a casa. Pero Eversleigh Court es un sitio cargado de historia, de malicia y de peligros. Claudine no tarda en verse atrapada por la pasión de sus dos hermanastros. David, sereno, cortés, estudioso, el marido perfecto. Y Jonathan, tempestuoso, arrogante, sensual, muy lejos de un buen marido aunque muy cerca del perfecto amor. El triángulo amoroso que forman brillará más alto que las llamas que envuelven a Francia y Europa. Y puede quemar tanto o más que una revolución.