Segundo de la serie. Rebecca Valentine, ejecutiva de publicidad de Nueva York, se enfrentaba al mayor desafío de su vida: su reloj biológico. En un esfuerzo por mantenerlo todo bajo control, decidió pasar un tiempo en un tranquilo rancho de Wyoming…El encantador Mitchell Tucker no era en absoluto lo que Rebecca esperaba. El ranchero no sólo era un millonario hombre de negocios sino que también era un padrazo dedicado en cuerpo y alma a sus dos hijos. Rebecca no podía negar la atracción que sentía por él, pero no podía abandonar todo lo que había deseado en la vida para lanzarse a lo desconocido… O quizá sí.