Sus corazones estaban en peligro.
El momento en el que la doctora Jacinta Ford se enfrentó por fin a su jefe Mike Trent fue tremendamente acalorado. Enseguida surgió el conflicto de cómo debían dirigir la clínica, pero después de una semana trabajando juntos, acabaron besándose hasta perder la cabeza.
Jacinta no podía perder el tiempo en una aventura sin futuro, mientras que Mike había jurado no volver a casarse jamás. Parecía no haber solución para aquel dilema, hasta que Jacinta descubrió lo que Mike planeaba hacer con la clínica...