En un mundo futuro, lleno de milagros tecnológicos, donde los edificios son construidos en horas y el cuerpo humano se puede modelar sin límites, dos amigos cometen un terrible error. Mark McGovern, el hijo de un acaudalado político, y Darin Kinsley, de la parte pobre de la ciudad, lanzan un sofisticado virus informático llamado «rebanador». Ese virus, terriblemente destructivo, se encuentra localizado en la mente de un niño. El chico, que solo es consciente de su existencia virtual, se convierte en un arma codiciada por todos, ya sea para ser utilizado con fines letales o para ser aniquilado por el bien de la humanidad. Mientras tanto, su madre, que contempla con horror las dos terribles amenazas que se ciernen sobre la vida del niño, tratará de hacer todo lo que esté en su mano para salvarlo.
David Walton saltó a la fama en 2009 gracias a la concesión del premio Philip K. Dick a su novela Juego mortal, pero antes de eso ya era un reputado autor de relatos de fantasía y ciencia ficción. Los asiduos del género ya esperan la aparición de su segunda novela, Quintessence.