LEOPOLDO Alas Mínguez (Arnedo, 1962 Madrid, agosto 2008) a pesar de haber muerto en plena juventud dejó una abundante obra derramada en casi todos los géneros literarios, pero es en su poesía en la que dejó lo más apreciado, hondo, brillante y depurado de su quehacer literario.
Perteneció Leopoldo Alas a la generación de los años ochenta del pasado siglo, que se caracteriza principalmente por un abierto eclecticismo, aunque la estética que le dio personalidad fue la de una experiencia vital trasladada a la poesía, con un lenguaje aparentemente cotidiano y sencillo. En el caso de Leopoldo Alas fue transformándose desde su primer libro Los Palcos, de una tierna ironía y un deliberado ingenuismo,
a una poesía elegiaca y confesional, teñida de una amarga y lúcida mirada meditativa en la que los temas fundamentales de la poesía de siempre son tratados con un lenguaje absolutamente moderno y actual, que se sitúa además en la más rica tradición literaria, en un acertado equilibrio entre clasicismo y contemporaneidad. El propio Alas dejó escrito sobre su poesía: La poesía es el modo más genuino de mi escritura: su fundamento. Todo lo demás que he escrito ... ha estado marcado por el fulgor poético que necesita el lenguaje para ser auténticamente expresivo y comunicativo. Sin poesía, la palabra se extingue. Sin poesía no hay sonido, ni eco, ni sentido.
En esta Poesía Reunida, se recogen los cinco libros que publicó en vida, más una breve selección de su obra inédita.