La España de los grandes vividores.
El Marqués de Figueruelo de la Pradera por la gracia del rey. Sus andanzas, sus socios, sus negocios al filo de la navaja. La España de charanga y no precisamente de pandereta, sino de euros conseguidos sin parar en barras. Esta novela no se basa en hechos reales... pero está cerca de ellos.
El gran hombre, como todo humano, tambien tiene su canción triste.