Sara Forrester regresa a Eford, un pequeño pueblo del Sur de Estados Unidos, diez años después de verse involucrada en la muerte de Jason Graham, miembro de una familia cuyo apellido que en ese lugar lo simboliza todo. La intención de limpiar su nombre despierta viejos odios, rencillas y dramas familiares, e incluso a un asesino que vive oculto entre sus habitantes. Pero también el amor en el corazón de un hombre al que debería odiar.