Cada Ser Humano es un mundo. Un mundo que es necesario cultivar desde el primer día. Si no lo hacemos, nuestra mente será como un cuarto trastero sin salida, dónde almacenaremos todas nuestras frustraciones, traumas y decepciones y que, poco a poco, nos convertiremos en seres estancados en la rigidez. O sea, en adultos. Entonces, la evolución mental será nula.
Alguien dijo: “dadme un punto de apoyo y moveré el Mundo”.
Y yo digo: “dadme un rayo de luz y cambiaré el mundo”.
(Jocasmos.)
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- A Modo de Prólogo.
- Primera Parte
- Madrid, 1 de agosto de 1998.
- Segunda Parte
- Madrid, 1 de agosto de 2008.
- Tercera Parte
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