Para muchos, Benjamín Vicuña Mackenna (1831-1886) evoca solamente el nombre de una importante calle en Santiago o el recuerdo de la persona que dirigió las obras del cerro Santa Lucía que lo transformaron en lo que es hoy. Sin embargo, fue mucho más que eso: revolucionario en su juventud, condenado a muerte, dos veces exiliado, amnistiado, agente diplomático no oficial en Estados Unidos, diputado, senador, candidato a la presidencia de la república, periodista, bombero e historiador prolífico. su trayectoria, relatada en estas páginas bajo forma de novela histórica o de biografía novelada, permite adentrarnos en el siglo XIX chileno y ver cómo un hombre público, al final de su vida, se cuestiona sobre su actuación en política, planteándose preguntas sobre temas que siguen siendo de actualidad: ¿cómo tratar a los pobres?, ¿a los mapuche?, ¿cómo deben ser nuestras relaciones con Perú, Bolivia y Estados Unidos?, ¿podemos dejar de ser revolucionarios para transformarnos en reformistas?