Cuando los problemas vienen de dos en dos…
Tal vez Michael D’Angelo fuera la fuerza impulsora que había detrás de las exitosas galerías Archangel, pero eso no significaba que fuera perfecto… ¡había perdido su halo años atrás! Sin embargo, cuando una mujer atractiva apareció en París asegurando que él era el padre de unos gemelos, a Michael no le cupo la menor duda de que él no era responsable de aquel error.
La exaltada Eva Foster no se marcharía hasta que los gemelos que estaban a su cargo se reunieran con su padre. Pero resultó que la única persona que esperaba que pudiera ayudarla era la persona que se interponía en su camino.