“Era un día soleado… así empieza el cuento que está escribiendo, con sus dibujos y todo, Martina.Martina tiene cinco años y es mi nieta, todavía no ha aprendido a leer ni a escribir en el colegio, pero su profe Beatriz le ha contado muchos cuentos y todos los viernes a todos los de la clase les deja escoger un cuento de la biblioteca para que el fin de semana, cuando están con sus papás, puedan leerlo juntos. De esa manera Martina comienza ya a juntar las letras para formar palabras y, lo que es más importante, comprende su significado.”