En la poesía de Américo Ferrari , lo visual, la imagen, tiene una estrecha vinculación pictórica, como recordando con Reverdy que en la naturaleza no hay imagen, que es el hombre quien la crea. La ironía es otro sesgo de esta poesía. De ahí que la elusiva poética entregue más dudas que certezas, más preguntas que respuestas, como en la vieja estirpe vallejiana.