«Apagado, abierto tres lados a contratiempo, refugio cierto sin salida».
Un matrimonio de ancianos, ante la tesitura de tener que abandonar la aldea en la que viven, víctimas del despoblamiento rural, optan por resistirse y animar a otros ancianos a instalarse en el lugar, con el propósito de no perder la atención médica y los servicios sociales.
Los acontecimientos y los problemas se van sucediendo, pero su cerrazón y el deseo de un nuevo estilo de vida al final de su existencia hace que la voluntad colectiva florezca en la aldea.