El siglo XIX mexicano estuvo marcado por la guerra de Independencia, la invasión estadounidense, la intervención francesa, la Reforma y el porfiriato. Las tendencias políticas de México durante la primera mitad de dicho siglo tuvieron sus filiaciones literarias; los liberales eran románticos, mientras los conservadores neoclásicos. Francisco Ortega, identificado con el independentismo, fue uno de los primeros autores del romanticismo en México y América.