Diario de un escritor delgado es la historia de un hombre ingenuo y primitivo que unos días contempla la vida desde el optimismo más beligerante, y otros desde el más profundo desaliento. Sobre unas cosas parece tener las ideas muy claras, sobre otras no tanto, pero su peculiar sentido de la realidad siempre le está empujando a dejar testimonio de todo. Cualquier incidente cotidiano, por insignificante que pueda parecer, le sirve como excusa para ejercitar el lenguaje achulado y, en ocasiones, barriobajero que le caracteriza; mientras se cuenta a sí mismo sus andanzas y chismes íntimos, aprovecha para hacer una crítica, a pequeña escala, del mundo mediocre y ruin que le rodea, disparando en todas direcciones sin pensar en las consecuencias.