¿Qué se anhela durante la espera? ¿Qué desea la mujer que espera? ¡Cuántos segundos, minutos, horas, días, semanas, meses, años, siglos pasados tras los muros, enclaustradas, silenciosas, esperando el instante que no llega, esperando la luna que no cesa! Si ellas, mujeres de todos los tiempos, pudieran ahora por fin elevar sus voces, coger sus plumas y exclamar atónitas: “Fuimos mujeres de esperanzas rotas. Fuimos amadas, algunas veces olvidas. Fuimos mujeres, escritoras, a veces hicimos de la escritura nuestra bandera, otras la historia nos hizo escritura”. Con este estudio sobre la espera, hemos querido dar voz a determinadas escritoras del continente europeo como Hélène Cixous, Annie Ernaux y Marie Chaix que, desdibujaron bajo su pluma el cuerpo materno tan dulcemente añorado. Hemos querido dar cabida a escritoras como Sabine Sicaud que, ante la temprana muerte apostó por cantarle a la vida que se le escapaba. También hemos deseado, como lectores que somos primero, encontrar al igual que Clarice Lispector una respuesta existencial a ese sentir-vivir del ser que toma conciencia de su Yo, en el devenir del ser escribiente. Hemos intentando recuperar la memoria de la Shoá, a través de los diarios de aquéllas que, ante la muerte, siguieron aferrándose a la vida, siguieron suspirando por el ser amado. Y más allá del continente europeo, hemos querido dar cabido, en este trabajo, a dramaturgas argentinas como Beatriz Mosquera y Patricia Zangaro que hicieron de la resistencia ideológica una forma de trascender las normas sociales preestablecidas, una manera consciente de huir de la represión como mujeres, pero sobre todo como seres humanos.