Esta publicación pretende saldar, al menos en parte, la deuda que Chile tiene con la «Hormiga». Delia del Carril ha sido conocida por mucho tiempo como «una de las mujeres de Neruda». Pero ella fue mucho más que eso. Pocos conocen su historia, su aporte a la cultura o su lucha política por un mundo más justo durante, por ejemplo, la Guerra Civil Española. La «Hormiga», como la llamaron todos por aquello de que siempre llevaba una carga más grande que su cuerpo, supo hacer de Chile su patria definitiva y aquí concibió la mayor parte de su obra artística, en la ya mítica casa de Michoacán, donde recibió a Diego Rivera, María Luisa Bombal y otros destacados intelectuales del mundo entero. Virginia Vidal también reconstruye en este libro, a partir de algunos testimonios, la relación que mantuvo con Neruda y el innegable dolor reprimido ante la «traición» de quien fue su gran amor.