Andrea J. Larson escribe unas cartas a su tío Willi -uno de los autores más famosos de nuestro tiempo-. Se trata de Anselm Grün. Por un lado, la joven madre de tres hijos, que ve en una vida llena de libertades también muchas limitaciones; por otro, el monje ya mayor, que de joven eligió la vida monástica y en la limitación descubrió enormes libertades.
En su diálogo muy personal abordan el amor, la relación, la comunidad, la soledad, la responsabilidad con uno mismo y con el mundo, los descubrimientos y las decepciones, la fe y la duda, en suma, la vida con todas sus facetas. También hablan de la enfermedad y de la muerte. Surge así una imagen fascinante de las posibilidades para una vida lograda.
- Pobres y comunidades de base
- Soportar la soledad
- Vivir en plenitud
- Vivir con coherencia
- Éxito, ambición y satisfacción
- Dinero, posesión y trabajo
- Desinterés y encuentro con uno mismo
- Vivir con la propia historia
- Amor y vitalidad
- Imágenes de Dios
- Iglesia y fe en la actualidad
- Gratitud y búsqueda del sentido
- Las preguntas de la filosofía y las repuestas de la Biblia
- Buscando a un Dios «femenino»
- Sobre la relación con la crítica y las crisis
- El camino de la vida y las «últimas cosas»
- Epílogo
- Créditos