En Roberto Bolaño: el investigador desvelado, Franklin Rodríguez examina de manera original y rigurosa una obra que no cabe en ningún tipo de ordenamiento permanente. El libro se ocupa de nociones como el valor, la crueldad, la ejemplaridad, lo desconocido, el mal, la locura, la casualidad, el absurdo, la tarea del escritor, entre otras, y de modalidades narrativas que en la obra de Bolaño se revelan como fundamentales: reescritura, investigación detectivesca, fragmentación y bifurcación, autofiguración y desorden, crítica literaria, homenajes e intertextualidad.