Azcona dice de Gracia en esta obra: “Abandonar un personaje como Curro Jiménez y seguir siendo Sancho Gracia es una hazaña que sólo se explica por la calidad del actor: un caballo, el paisaje del campo español y los derroches de generosidad ayudan a los suyo a la hora de componer el personaje de bandolero; exteriorizar pie a tierra y en planos cortos las miserables tragedias del derrotado boxeador de “Mala Racha”, de José Luis Cuerda, o del señorito asesino de “Jarabo”, de Juan Antonio Bardem, eso, ya es otro cantar”.
El humor negro y la sátira son dos de las notas predominantes en la obra Azcona. En total ha sido el guionista de más de 80 películas a lo largo de cuarenta años de trayectoria profesional, aunque nunca va a los estrenos -desaparece de casa y se aloja en un hotel para evitar los compromisos- y siempre dice que le gusta más leer que ir al cine.
Huye de las cámaras, la fama y la popularidad. Hasta tal punto le gusta mantenerse lejos del escaparate público que durante una época corrió el rumor con sabor a leyenda urbana de que Azcona o existía, que se trataba en realidad de un grupo de guionistas anónimos que firmaban bajo este seudónimo.