La presente redición de Los de abajo, a manos de Víctor Díaz Arciniega, recupera la edición de 1920 establecida por el propio Mariano Azuela e impresa por Tipografía Razaster. Incluye además una introducción y un aparato crítico del editor en el que se estipulan los cambios que se llevaron a cabo en la edición de 1958.
- Índice
- Los de abajo, cien años después VÍCTOR DÍAZ ARCINIEGA
- LOS DE ABAJO
- Primera parte
- I. Te digo que no es un animal…
- II. Todo era sombra todavía…
- III. Entre la maleza de la sierra…
- IV. Faltaron dos…
- V. La Codorniz, sobresaltado…
- VI. Luis Cervantes no aprendía aún a discernir…
- VII. Adormilado aún, Demetrio paseó…
- VIII. Luis Cervantes, otro día…
- IX. Señá Remigia, emprésteme…
- X. ¿Por qué no llama al curro…?
- XI. Oye, curro, yo quería…
- XII. La herida de Demetrio…
- XIII. Yo soy de Limón…
- XIV. Si vieras qué bien explica…
- XV. En el baile hubo mucha alegría…
- XVI. A medianoche, Demetrio Macías…
- XVII. ¿De modo es que si por este corral…?
- XVIII. Demetrio llegó con cien hombres…
- XIX. Allí vienen ya los sombrerudos…
- XX. ¡Que viene Villa!…
- XXI. El atronar de la fusilería…
- Segunda parte
- I. Al champaña que ebulle…
- II. ¡Qué brutos!…
- III. Le presento a usted, mi general…
- IV. Al atardecer despertó Luis Cervantes…
- V. Como los potros que relinchan…
- VI. Se habían alojado en una casona…
- VII. ¿Yo qué sé?…
- VIII. Ya el sol se había puesto…
- IX. El torbellino del polvo…
- X. La tropa acampó en una planicie…
- XI. Antes de la madrugada…
- XII. Iban llegando ya a Cuquío…
- XIII. Caída la cabeza, las manos cruzadas…
- XIV. Humo de cigarro, olor penetrante…
- XV. Las calles de Aguascalientes…
- Tercera parte
- I. Muy estimado Venancio…
- II. ¿Por qué se esconden ustedes?…
- III. Aquel pueblecillo…
- IV. Asomó Juchipila a lo lejos…
- V. Entraron a las calles de Juchipila…
- VI. La mujer de Demetrio Macías…
- VII. Fue una verdadera mañana de nupcias…