El libro examina la relación entre dos fenómenos emergentes de las ciudades contemporáneas, el trabajo en red y la incidencia política, desde los postulados de la Educación Popular y específicamente desde la interacción de los conocimientos expertos y los saberes comunitarios. El escenario de investigación está delimitado por la experiencia de la Red del Buen Trato de Cali en la gestión de la Política Pública de Convivencia Familiar, siguiendo los principios metodológicos de la Investigación Acción Participativa. El estudio evidenció que las prácticas de trabajo en red se ejercen en medio de dos fuerzas simbólicas que responden a la lucha de los saberes en juego: la instrumentalización que busca cooptarlas y ponerlas al servicio de intereses particulares, y la sinergización que apunta a reconocerlas como propias y potenciarlas hacia el alcance de proyectos comunes. Los hallazgos confirmaron la hipótesis que las prácticas de incidencia política, además de ser procesos de participación ciudadana que articulan los intereses de diferentes actores y buscan garantizar la realización de los derechos fundamentales, son procesos intersubjetivos donde se dan relaciones interpersonales que marcan la calidad afectiva de los vínculos y son procesos interculturales donde interactúan saberes diferentes y desigualmente constituidos.