Confesión de un médico con honda vocación de ayuda. Una tremenda curiosidad le adentra por los pasadizos más oscuros del alma humana, la suya y la de los demás. Arriesgada aventura para el autor y para el lector, una vez traspasado el umbral de los laberintos del espíritu. Lo grave del asunto se atempera por la finura de un humor que acompaña la obra de principio a fin. Suave y persistente ironía, británica si no saltara más de una chispa de socarronería carpetovetónica. Personalísima y polémica visión desde el otro lado de la mesa de la consulta. Biografía íntima que se desparrama en anécdotas de vida cosmopolita, la de un ciudadano del mundo, cuya españolía golpea las puertas del chiquero que el autor pretende, en vano, controlar. Telón de fondo son algunas décadas de historia reciente, que se pueden contar de varias maneras, incluidos los cambios de sensibilidad colectiva. Ambientado en sus circunstancias de espacio y de época, el autor, con mirada de médico psiquiatra, comparte con nosotros gozos y miserias de la condición humana universal. La sociedad de hoy, en creciente demanda de cuidados, dilata las fronteras de la Psiquiatría y de la Psicología. Fernando Claramunt López ha vivido el desarrollo de estas ciencias y ha conocido personalmente a sus máximas figuras en el ámbito internacional. Su larga y muy densa experiencia se vierte aquí en una prosa clara, cautivante, del todo asequible para el no especialista. Ha escrito unas Memorias autobiográficas cuya lectura nos enriquece con observaciones y sugerencias en cada página.