La cocina de los chinos en Cuba. Recetario familiar contiene las más populares recetas de la cocina chino-cubana. Junto a estas, se incluyen historias de los principales restaurantes establecidos en La Habana, de sus propietarios y de los menús que en ellos se servían. Aquí el lector podrá disfrutar de la experiencia de confeccionar exquisitos manjares hoy olvidados y conocer sus orígenes y el modo en que fueron adaptados a los gustos de Cuba. Asimismo se relata la historia de la emigración de los chinos hacia Cuba. Estos llegaron a la isla tras el Decreto de Colonización Blanca del 21 de octubre de 1817, redactado con el objetivo de reducir la proporción de población negra aceptando la emigración de personas de raza blanca y asiática. En consecuencia, en 1847, con el viaje del bergantín Oquendo desde Asia hasta el poblado de Regla, en la bahía habanera, tras una travesía de ciento treinta y un días, se inició en Cuba la trata de chinos. En el episodio perecieron trece personas, de las ciento noventa y nueve que zarparon. El proceso fue continuado al punto de que para finales del siglo habían en Cuba más de ciento veinte mil chinos contratados en condiciones de verdadera esclavitud. Durante mucho tiempo los términos básicos de los contratos no sufrieron modificación, como los ocho años de servicio y el «salario» de un peso a la semana; dos libras de arroz y media de carne o pescado, en el día; y dos cambios de ropa, una chaqueta y una frazada, al año. Sin embargo, pronto esta comunidad se constituyó en elemento clave de la cultura cubana, notoriamente visible en la vida habanera en el Barrio chino de La Habana y en múltiples restaurantes y negocios.