Estaba empeñado en obtenerlo todo de ella...
Cesare Andriotti era rico, poderoso, sexy... y siempre conseguía lo que quería. La bella Bianca Jay no era ninguna excepción y, aunque no le había resultado nada fácil, por fin había conseguido que se convirtiera en su amante. Sin embargo, hasta Cesare era consciente de que no la conocía realmente; no sabía qué se escondía tras aquellos increíbles ojos color ámbar. Se sentía tan intrigado que acabó pidiéndole que se casara con él... ¡pero ella lo rechazó! De una manera u otra, iba a conseguir que la huidiza Bianca fuera suya por completo...