Primero de la serie. Hacía mucho tiempo que Alejandro Navarro Vázquez, conde de Roda, buscaba la venganza. Su mujer le había traicionado incumpliendo un código que, a ojos de su orgullosa moral, era inquebrantable. La ruptura de su matrimonio era una losa que pesaba sobre él día y noche.
Había llegado el momento de hacer justicia. Un detective privado le había informado de que Jemima tenía un hijo de dos años. Su frívola esposa había acabado teniendo un niño ilegítimo y él iba a poder tener su ansiada revancha de una vez por todas.