Se cumplirá la profecía y muchas imagenes del emperador Vespasiano quedarán destruidas.
El emperador Vespasiano, en el año 70 a.C., después de destruir Jerusalén y su templo, robó La Menorá junto a todos sus tesoros. Inmediatamente después de esta guerra, Vespasiano inició la obras del Coliseo de Roma y realizó una emisión de monedas de oro, áureos, con su imagen en el anverso y en el reverso la imagen de una mujer capturada que representaba a Palestina, con la inscripción «judea capta».
Recientemente se ha encontrado enterrada junto a las paredes del Coliseo de Roma una placa de mármol y en ella, en latín, está escrito: «Este gran edificio fue financiado mediante el botín de la guerra con Palestina». Ello nos demuestra que, con toda seguridad, el emperador Vespasiano utilizó el oro de La Menorá y del resto de tesoros del templo de Jerusalén, para acuñar monedas de oro, áureos, conmemorativas de su victoria sobre Palestina con su imagen y la inscripción «judea capta». Con ello financió estas obras del Coliseo de Roma, se hizo publicidad de su victoria y fundió las imágenes sagradas del templo para eliminar los símbolos de los judíos.
En esta novela, de ficción-histórica, el museo de Jerusalén, con la ayuda de un sabio rabino y de las autoridades del país, inician la búsqueda y compra, por todo el mundo, de estas monedas de Vespasiano con la inscripción «judea capta» para que Jerusalén volviera a tener a La Menorá, conteniendo su oro de la historia de Israel.
Con la recuperación de La Menorá, con su oro original y la destrucción de las imágenes de Vespasiano, que estaban en las monedas, se cumplirán antiguas profecías escritas sobre el regreso de La Menorá y de la destrucción de las imágenes del emperador.
- Prólogo
- Presentación
- I
- La llegada de Rafael a Jerusalén
- II
- Un sábado en el muro de las lamentaciones
- III
- La visita de Rafael al museo de Israel
- IV
- El director del museo explicó la historia antigua del pueblo de Israel y de la Menora
- V
- El rabino les explicó la historia del templo de Jerusalén
- VI
- El rabino comentó la importancia del templo en la religión judía, cristiana e islámica
- VII
- Flavio Josefo, el historiador judío del siglo I d. C.
- VIII
- El rabino explicó a Rafael cómo fue la destruccion de Jerusalén y su templo
- IX
- El rabino comentó a Rafael que hubo profetas que anunciaron la destrucción del templo
- X
- Rafael, seguidamente, preguntó al rabino y al director del museo: «¿dónde está actualmente la menorá que robó el ejército romano siguiendo las órdenes del emperador vespasiano?»
- XI
- Las monedas de oro, áureos, acuñadas por vespasiano poco después de la captura de Jerusalén por Vespasiano, con la inscripcion IUDAEA junto a una mujer sentada en el adverso, llorando, reprentando a Judea
- XII
- El reciente hallazgo de una lápida de mármol con la inscripción: «obra financiada con el botín de la guerra palestina», colocada en las paredes del coliseo de Roma, nos confirma que el coliseo de Roma fue pagado, en parte, con monedas acuñadas con el oro de la Menorá y del resto de tesoros del templo de Jerusalén. El coliseo fue construído inmediatamente después de la destrucción y saqueo del templo de Jerusalén
- XIII
- Rafael, que había seguido con mucho interés las explicaciones del rabino y del director del museo, preguntó:«¿Por qué el estado de Israel no construye una nueva menorá para ser venerada en las oraciones de los judios?»
- XIV
- Rafael les preguntó, a continuación:«¿Y si el museo de Jerusalén cincelara una nueva Menorá con el oro, previamente fundido de las monedas, áureos, del emperador vespasiano con la inscripción IUDAEA (Judea)?»El rabino exclamó: «ese sí que es el oro de la menorá del templo de Jerusalén, que era el símbolo sagrado de la historia de Israel»
- XV
- Rafael, el turista que visitó Jerusalén, de regreso a Barcelona y, al llegar al aeropuerto Ben Gurión de Tel Aviv, pudo ver una original Menorá diseñada por el pintor y escultor catalán, Salvador Dalí. Este artista, el más completo del siglo XX, se inspiró en el tronco y ramas de los olivos, abundantes en el paisaje de Israel, para realizar esta representación de esta Menorá
- XVI
- La idea de realizar una Menorá con las monedas de vespasiano con la inscripcion Judea capta, agradó mucho a los lectores de las publicaciones Judía por internet y, rápidamente, empezaron a llegar donaciones de estas monedas de oro por parte de muchos judíos. También hubo algunas donaciones por parte de cristianos y de musulmanes al considerar que era un proyecto para las tres religiones
- XVII
- En un semanario judío de estambul publicaron este proyecto sagrado y, al cabo de unos pocos días, unos comerciantes sefardíes del gran bazar de estambul contactaron con el museo de jerusalén ofreciendo, en venta, un lote de treinta y dos monedas de oro de vespasiano con la inscripción judea capta que habían sido compradas a varios coleccionistas de turquía
- XVIII
- Desde Suiza avisaron al museo de que la casa de subastas Sotheby’s, en Zúrich, ofrecía, en una subasta, dos monedas de Vespasiano con la inscripción Judea capta
- XIX
- Un anticuario de Corfú, en Sicilia, contactó con el museo de Jerusalén ofreciendo un importante tesoro, asegurando que habían sido halladas, recientemente, setenta y siete monedas de oro con la inscripción Judea capta
- XX
- El director del museo propuso a Salomón contratar un crucero por las principales ciudades del mediterráneo, con salida y llegada al puerto de Tel Aviv
- XXI
- El día de la salida del crucero desde Tel Aviv. La primera parada era en túnez para, posteriormente, llegar a Eljem
- XXII
- Después de una noche de navegación, el barco llegó a un nuevo destino: Roma
- XXIII
- Nueva parada del crucero: la bonita ciudad de Barcelona
- XXIV
- El templo de Abraham en Barcelona. Un espacio de culto en forma de pez, común para las tres religiones
- XXV
- Próximo destino del crucero: Málaga. Seguidamente, Córdoba y Sevilla en un coche de alquiler
- XXVI
- XXVII
- Las ruinas de Medina Azahara, junto a la ciudad de Córdoba
- XXVIII
- La estatua de Maimónides en Córdoba
- XXIX
- XXX
- XXXI
- El nuevo destino del crucero fue Tánger, en donde el barco estaría anclado durante dos días
- XXXII
- Los comerciantes del distrito de los diamantes de Nueva York contactaron con el museo de Jerusalén y les ofrecieron cincuenta y ocho monedas
- XXXIII
- Finalmente, el museo Judío de Jerusalén tuvo reunidas las suficientes monedas con inscripción IUDAEA para reconstruir a la Menorá, en un tamaño más reducido, con el oro de la historia de Israel
- XXXIV
- Pasados tres meses, el orfebre señor Argenter llamó emocionado al director del museo de Jerusalén informándole de que tenía finalizada la Menorá
- XXXV
- Casi dos mil años después, la Menorá regresó a Jerusalén. El gran rabino de Israel anunció, en una emotiva ceremonia, que con su llegada vendrían muchos años de paz para Israel y sus países vecinos de oriente medio
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