En el contexto de la Asia Meridional posnuclear las disparidades entre India y Pakistán se han acrecentado, a la vez que ha aumentado la conflictividad bilateral. No obstante, a partir de 2004 los dos países han iniciado un proceso de diálogo que, a pesar de sus limitaciones, aparece como el único intento claro para afrontar el grave problema de seguridad regional que representan la existencia de la disputa por la región de Cachemira y la nuclearización del subcontinente indio. nEn el nuevo siglo, en un escenario del entorno regional convulso (marcado por la guerra en Afganistán) y de gran dinamismo, India y Pakistán siguen contemplando sus diferencias desde una perspectiva bilateral, primando una óptica estatocéntrica, frente a la posibilidad de una interdependencia y cooperación.