(San Sebastián, 1872-Madrid, 1956). España. Su padre (Serafín Baroja Zornoza), y su madre (Carmen Nessi y Goñi), pertenecían a familias distinguidas y conocidas en San Sebastián vinculadas con el periodismo y la imprenta. Pío fue el tercero de tres hermanos. Más tarde nació Carmen, también escritora ocasional. En 1891 terminó la carrera de medicina en Valencia y se doctoró en 1894 en Madrid con una tesis sobre el dolor. Fue mal estudiante y desde entonces mostró un carácter gruñón, arisco y descontento. Tímido y retraído, nunca se casó. Tras defender su tesis, marchó a Cestona, en el País Vasco. Pasó un año allí y después de una estancia en San Sebastián vivió en Madrid donde empezó a colaborar en periódicos y revistas de ideas sociales anarquistas y de izquierdas. En 1900 publicó su primer libro, una recopilación de cuentos titulada Vidas sombrías, la mayoría escritos en Cestona sobre gentes de esa región y sus propias experiencias como médico. El libro fue comentado por escritores como Miguel de Unamuno, Azorín y Benito Pérez Galdós. Poco después intimó con el anarquista José Martínez Ruiz, «Azorín», y pretendió entrar en la política. Tras su fracaso en la política, viajó por Europa (residió en París y Londres, y pasó por Italia, Bélgica, Suiza, Alemania, Noruega, Holanda y Dinamarca) y acumuló una impresionante biblioteca que instaló en el caserío de Itzea, donde pasaba los veranos con su familia. En 1935 fue admitido en la Real Academia de la Lengua. Durante la Guerra Civil fue amenazado por los carlistas y emigró a París. Volvió al término de la guerra y tuvo problemas con la censura. Identificado con las ideas liberales, repudió al comunismo. Murió en 1956. Su ataúd fue llevado en hombros por sus admiradores, Ernest Hemingway y Camilo José Cela.
- Cover
- Title page
- Copyright page
- Sumario
- Presentación
- La busca. Primera parte
- I. Preámbulo. Conceptos un tanto inmorales de una pupilera. Charlas. Se oye cerrar un balcón. Canta un grillo
- II. La casa de doña Casiana. Una ceremonia matinal. Complot. En donde se discurre acerca del valor alimenticio de los huesos
- III. Primeras impresiones de Madrid. Los huéspedes. Escena apacible. Dulces y deleitosas enseñanzas
- IV. ¡Oh, el amor, el amor! ¿Qué hace don Telmo? ¿Quién es don Telmo? En el cual el estudiante y don Telmo toman ciertas proporciones novelescas
- Segunda parte
- I. La regeneración del calzado y el León de la zapatería. El primer domingo. Una escapatoria. El Bizco y su cuadrilla
- II. El Corralón o la casa del tío Rito. Los odios de vecindad
- III. Roberto Hasting en la zapatería. Procesión de mendigos
- IV. La vida en la zapatería. Los amigos de Manuel
- V. La taberna de la Blasa
- VI. Roberto en busca de una mujer. El Tabuenca y sus artificios. Don Alonso o el Hombre-boa
- VII. La kermesse de la calle de la Pasión. El Lechuguino. Un café cantante
- VIII. Las vacilaciones de Leandro. En la taberna de la Blasa. El de las tres cartas. Lucha con el Valencia
- IX. Una historia inverosímil. Las hermanas de Manuel. Lo incomprensible de La vida
- Tercera parte
- I. El drama del tío Patas. La tahona. Karl el hornero. La Sociedad de los Tres
- II. Una de las muchas maneras desagradables de morirse que hay en Madrid. El Expósito. El Cojo y su cueva. La noche en el observatorio
- III. Encuentro con Roberto. Roberto cuenta el origen de una fortuna fantástica
- IV. Dolores la Escandalosa. Las engañifas del Pastiri. Dulce salvajismo. Un modesto robo en despoblado
- V. Vestales del Arroyo. Los trogloditas
- VI. El señor Custodio y su hacienda. A la busca
- VII. El señor Custodio y sus ideas. La Justa, el Carnicerín y el Conejo
- VIII. La plaza. Una boda en la Bombilla. Las calderas del asfalto... El noviazgo del Carnicerín y de la justa se formalizaba; el señor
- II. Mala hierba. Primera parte
- I. El taller. La vida de Roberto Hasting. Álex Monzón
- II. La señorita Esther Volowitch. Una boda. Manuel aprendiz de fotógrafo
- III. La Europea y La Benefactora. Una colocación extraña
- IV. La baronesa de Aynant, sus perros y su mulata de compañía. Se prepara una farsa
- V. Vida y milagros del señor de Mingote. Comienza la dulce explotación de don Sergio
- VI. Kate, la niña blanca. Los amores de Roberto. El pundonor militar. Las cucas. Disquisiciones antropológicas
- VII. El berebere se siente profundamente anglosajón. Mingote, mefistofélico. Cogolludo. Despedida
- Segunda parte
- I. Sandoval. Los sapos de Sánchez Gómez. Jacob y Jesús
- II. Los nombres de los sapos. El director de Los Debates y sus redactores
- III. El parador de Santa Casilda. La historia de Jacob. La Fea y la Sinforosa. La chica sin madre. Mala Nochebuena
- IV. La Navidad de Roberto. Gente del Norte. A la misma hora, Roberto Hasting marchaba a casa de Bernardo
- V. Paro general. Juergas. El baile del Frontón. La iniciación del amor
- VI. La nieve. Otras historias de don Alonso. Las Injurias. El asilo del Sur
- VII. La Casa Negra. Incendio. Fuga
- VIII. Las cuevas del Gobierno Civil. El repatriado. La sopa del convento
- IX. Noche en el paseo de la Virgen del Puerto. Suena un tiro. Calatrava y Vidal. Un tango de la bella Pérez
- Tercera parte
- I. ¿Será la buena? Proposiciones de Vidal
- II. El Garro. Marcos Calatrava. El Maestro. Confidencias
- III. La Flora y la Aragonesa. La Justa. La inauguración del Salón París
- IV. Un fusilamiento. En el puente del Sotillo. El destino
- V. El calabozo del juzgado de guardia. Digresiones. La declaración
- VI. Lo que pasaba en el despacho del juez. La Casa de Canónigos
- VII. La Fea y la Salvadora. Ortiz. Antiguos conocidos
- VIII. La pista del Bizco. Las afueras. El ideal de Jesús
- III. Aurora roja
- Prólogo. Cómo Juan dejó de ser seminarista
- Aurora roja. Primera parte
- I. Un barrio sepulcral. Divagaciones trascendentales. Electricidad y peluquería. Tipos raros, buenas personas
- II. La vida de Manuel. La tertulia del Enano. El señor Canuto y su fraseología
- III. Los dos hermanos. Juan, charla. Recuerdos de hambre y de bohemia
- IV. El busto de la Salvadora. Las impresiones de Kis. Malas noticias. La Violeta. No todo es triste en La vida
- V. A los placeres de Venus. Un hostelero poeta. ¡Mátala!
- VI. Las vagas ambiciones de Manuel. Las mujeres mandan. Roberto. Se instala la imprenta
- VII. El amor y la debilidad. Las intermitentes y las golondrinas. El bautizo de S. M. Curda I en una imprenta
- Segunda parte
- I. Juego de bolos, juego de ideas, juego de hombres
- II. El derecho. La ley. La esclavitud. Las vacas. Los negros. Los blancos. Otras pequeñeces
- III. No hay que confiar en los relojes ni en la milicia. Las mujeres son buenas. Aun las que dicen que son malas. Los borrachos y los perros
- IV. El inglés quiere dominar. Las razas. Las máquinas. Buenas ideas, bellos proyectos
- V. El buen obrero socialista. Los esparcimientos de Jesús
- VI. El francés que canta. El protylo. Cómo se llegan a tener las ideas. Sinfonía en rojo
- VII. Un paraíso en un Camposanto. Todo es uno y lo mismo
- VIII. Como cogieron al Bizco y no vino la buena. Nunca viene la buena para los desdichados
- IX. La dama de la toga negra. Los amigos de la dama. El pajecillo, el lindo pajecillo
- Tercera parte
- I. Las evoluciones del Bolo. Danton, Danton, era el hombre. ¿Anarquía o socialismo? ...Lo que gustéis
- II. Paseo de noche. Los devotos de santa Dinamita. El cerro del Pimiento
- III. El mitin en Barbieri. Un joven de levita. La carpintería del arca de Noé. ¡Viva la literatura!
- IV. Gente sin hogar. El Mangue y el Polaca. Un vendedor de cerbatanas. Un gitano. El Corbata. Santa Tecla y su mujer. La Filipina. El oro escondido
- V. Esnobismo sociológico. Anarquistas intelectuales. Humo
- VI. Miedos pueriles. Los hidalgos. El hombre de la Puerta del Sol. El enigma de Passalacqua
- VII. Otra vez Roberto. La lucha por la vida. El regalo del inglés. El amor
- VIII. La coronación. Las que encarecen los garbanzos
- IX. La noche. Los cuervos. Amanece. Ya estaba bien