El concepto de activo debe entenderse dentro de la dinámica de las operaciones comunes de un negocio, en la adquisición de bienes y servicios, con todas sus relaciones con otras cuentas del pasivo, el patrimonio, y las cuentas transitorias denominadas también nominales o de resultado al momento de codificar el soporte de contabilidad que contiene la transacción.
Por su metodología llega a estudiantes de cursos variados en su preparación básica, técnica, tecnológica y profesional, como también a los dueños de pequeñas y medianas empresas, para mejorar los procesos contables en la toma de decisiones operativas, financieras y de inversión. Estos temas se encuentran actualizados con la normatividad vigente y teniendo la expectativa de adopción de las Normas Internacionales de Contabilidad (NIC) y de las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF).