Mateo Malcovichviaja a Split durante la Guerra de los Balcanes para repatriar los restos mortales de su hermana Vera y llevarlos hasta el cementerio de Porvenir, en Tierra del Fuego, de acuerdo con sus instrucciones. Entre las pertenencias que debe liquidar, encuentra el bosquejo de una novela o una saga familiar con visos de crónica cuyo relato está lleno de conversaciones con el paisaje y con los vientos magallánicos que le cuentan de la llegada de los primeros inmigrantes croatas a la región y de cómo se va conformando aquella sociedad donde él reconoce la presencia de sus ancestros y la de sus propios progenitores.